Filosofía y Educación

Los sentimientos y la afectividad se han quedado con frecuencia en un lugar recóndito (cuando no inexistente) en los tratados de antropología. Como mucho, han jugado un papel secundario y hasta cierto punto "negativo". A menudo se ha pensado en ellos sólo como pasiones inferiores a la inteligencia y la voluntad, que tienden a alterar el recto comportamiento nublando la inteligencia o debilitando la voluntad y que por ello hay que esforzarse por minimizar y controlar, incluso a suprimir. Eso por un lado.

Pero es que, por otro, en la mentalidad hoy dominante se ha producido una gigantesca oleada, convertida en moda, de emotivismo y sentimentalismo ético y social. De tal manera que "lo que me gusta y lo que no me gusta, lo que me apetece y lo que no, aquello de lo que tengo ganas o no..." ha llegado a ser el criterio general para elegir entre "lo bueno" y "lo malo", para orientar la vida y para tomar decisiones incluso en los planos dominantes de la opinión pública, de las legislaciones, de lo políticamente correcto y de la política misma. El "deseo" se ha convertido en un referente soberano para la comprensión de la realidad o, dicho de otro modo -en referencia a un principio bien conocido-, en "medida de todas las cosas, de las que son y de las que no son".

El sentimentalismo, ciertamente, es negativo, pero no es menos cierto que lo es también cualquier exceso, como la tiranía de una voluntad opresora o la soberbia de una inteligencia "superior". Desde luego, la inteligencia y la voluntad son cualidades maravillosas, pero también lo son los afectos, el corazón. Son -todos ellos- dimensiones esenciales del ser humano. Los afectos, en concreto, son la manera en que nuestra subjetividad se enfrente a los acontecimientos de la vida y reacciona ante ellos. Aunque los sentimientos estén más allá de la racionalidad lógica, no por ello han de ser considerados en el ser humano como irracionales.

El "gusto" -en sentido amplio, como captación y tendencia espontánea al bien deleitable- es una parte importante de nuestra vida, un ingrediente indiscutible de nuestra naturaleza humana, y no se puede ir sistemáticamente en su contra porque, siendo una necesidad vital, su asfixia o insatisfacción sistemática acaba produciendo inevitablemente fracturas internas: tristeza, ansiedad, depresión, vacío, obcecación, dureza, intransigencia...

¿Y qué decir del "corazón" -sí: ese que tiene sus razones que la razón no comprende...-? Dietrich von Hildebrand ha descrito tres tipos de "afectividad espiritual": Las respuestas afectivas al valor, la contemplación de las acciones ajenas y los sentimientos poéticos y estéticos. El corazón es el núcleo de vivencias más profundo de la persona. ¿Existe una sensibilidad, una afectividad, "espiritual", tan radical y decisiva como la inteligencia y la voluntad humanas?

Nuestra línea compartida de reflexión viene siendo en estos pocos años de existencia del grupo Socrat3.99 la naturaleza humana. ¿Cuál es el lugar que en ella le corresponde a la afectividad, al "corazón"?

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Somos muy conscientes de que nos hallamos en un momento de honda crisis espiritual, moral y cultural. Y como católicos dedicados a la filosofía nos sentimos responsables de nuestro tiempo. Por eso hemos llamado a más amigos que compartan nuestra inquietud y deseen encontrarse para suscitar el diálogo y el intercambio de reflexiones y para plantearnos impulsar proyectos comunes.

En esta ocasión disfrutamos del privilegio de contar como ponente invitado con el Dr. Mariano Crespo, una de la figuras más importantes de la investigación filosófica sobre Ética, Fenomenología, afectividad y teoría del conocimiento en el ámbito internacional.

Nos hemos dado cita en VALLADOLID, concretamente, en la Casa de Convivencias de los Hnos. Maristas, Avda. Madrid, 66. La idea es llegar para la cena del viernes 2 de marzo, y permanecer hasta después de comer el domingo 4.

Este es el programa de actividades previsto:

SÁBADO 3

Mañana:
10 h.: Charla y coloquio:

D. MARIANO CRESPO
Instituto Cultura y Sociedad. Universidad de Navarra.

"¿EXISTE UNA AFECTIVIDAD ESPECÍFICAMENTE HUMANA?”

12,30 h.: Coloquio-Tertulia de intercambio de experiencias.

Por la tarde:

Convivencia y visita a Valladolid (por concretar)

Proyección de la película:
BEGIN AGAIN (2013). Dir.: John Carney.
Con Keira Knightley, Mark Ruffalo, Hailee Steinfeld, Adam Levine

(Coloquio después de la cena)

DOMINGO 4

Mañana:
10 h.: Exposición y diálogo acerca de:

- El corazón. Ed. Palabra, 1997.
- Las formas espirituales de la afectividad, Ed. Encuentro, 2016.

Ambos de Dietrich von Hildebrand.

12,30: Coloquio de impresiones y proyección de futuro.

Comida y despedida

Nos encantaría contar con vosotros (si venís con algún compañero o compañera interesado, mucho mejor, por supuesto). Tenemos mucho que compartir; y todos y cada uno, cada una, somos necesarios.

El precio de la estancia y la inscripción es de 110 euros. (Estudiantes, 70 €)

Podéis inscribiros hasta el 28 de febrero en la dirección de correo: ajimenea@gmail.com.

Os esperamos y animamos de corazón. Un gran abrazo filosófico y en la fe.

SOCRAT3.99